blog-header-escaleras-desktop

Blog

¿Cuáles son los platos típicos de Madrid?

Por | 7 September, 2016 | 0 comentarios

Seguro que más de una vez incluso siendo del mismo Madrid, se ha planteado cuáles son los platos típicos de Madrid. Muchos de ellos, como puede ser el cocido madrileño rápidamente lo asociamos  a Madrid, pero seguro que hay algún otro en el que dudamos un poquito  más. Nosotros hemos elaborado una lista de cinco platos típicos de Madrid, indicando una breve descripción, su historia y sus principales características. 

Top 5 de platos típicos de Madrid

COCIDO MADRILEÑO

Uno de los platos más completos de la cocina mediterránea es el cocido madrileño, en el que se mezclan muchos  ingredientes para combatir el frío del invierno. Como siempre cada maestrillo tiene su librillo, pero algunos de los ingredientes que lleva el cocido madrileño son: garbanzos, carne gelatinosa, media gallina, chorizo, morcilla, un pie salado de cerdo, una pelota (de carne picada, miga de pan, 1 huevo y especias), una col, cebolla, repollo, judías ve rdes, arroz, tocino, jamón, aceite y ajo.

Tradicionalmente se ha venido empleando la cocción ininterrumpida de los ingredientes en ollas de barro de base ancha. Al hacerse más despacio el sabor es mucho mejor, según dicen algunos expertos. Sin embargo, en la actualidad, se suele cocinar en olla a presión o olla exprés.  Algunos expertos en la materia dicen que si bien es cierto que el tiempo de elaboración del plato es mucho más rápido, como punto negativo está la perdida de sabor.

Historia

Su origen madrileño es un tanto incierto, la mayoría de los historiadores culinarios apuntan a que podría ser un plato de origen manchego. Por otra parte, todo parece indicar que el actual cocido tiene su origen en la cocina judía y más concretamente en el shabbat. Sin embargo, aparece con la denominación de madrileño desde finales del siglo XVII. La identificación con la capital de España se hace en un periodo que va desde finales del siglo XIX hasta mediados del siglo XX. Durante esa identificación el plato tuvo que ser aceptado por la clase burguesa española y por la Corte española, algo que ocurre cuando aparece en los menús de los restaurantes y abandona su lugar en las tabernas y figones.

Características

  • La elaboración del cocido no requiere de operaciones básicas de preparado, características de otros platos, como puede ser el cortado, el pelado de sus ingredientes, etc. Esta es una característica que hace diferenciarse al cocido madrileño con el resto de los cocidos españoles.
  • Debe realizarse de forma lenta, a fuego moderado y en un recipiente que se encuentre tapado.
  • Presenta una gran diversidad de ingredientes.
  • El tiempo medio de preparación suele ser de tres horas, pero el resultado merece la pena.

CALLOS A LA MADRILEÑA

Los callos a la madrileña corresponden a uno de los platos más típicos del invierno madrileño. Los callos son entendidos como pedazos de estómago de vaca o de carnero que se comen guisados. Es un plato que se suele servir caliente en una cacerola de barro. Los ingredientes que lleva este plato son los propios callos acompañados de rodajas de chorizo (chorizo de Cantimpalos),  morcilla, y jamón entreverado.  Es uno de los platos tradicionales de la gastronomía madrileña, aunque se suele tomar más en invierno debido a su alto nivel de calorías.

Historia

El origen de este plato se desconoce, aunque existen recetas del mismo en el año 1599. Ya en el año 1607 Domingo Hernández de Maceras presenta una receta de callos bajo la denominación: “De manjar blanco de callos de vaca”. Es un plato que nació en tabernas y que acabó con el tiempo en los más prestigiosos restaurantes.

Se sabe que se ofrece en un menú de Lhardy ya en pleno siglo XIX.  Algunas teorías no confirmadas sostienen que los emigrantes procedentes de Asturias trajeron la costumbre de sus tierras. Fuera de España puede encontrar diversas variantes de este plato.

En Europa, se pueden encontrar en diversas partes: En Francia se toman al “al estilo de Caen”, en Roma en el barrio de Trastevere se sirven con ralladura de queso pecorino romano

Características

Este típico plato se ofrece en numerosos bares y restaurantes de la capital.

  • Los callos proceden de diversas partes de la anatomía de la vaca (vísceras, morro y patas), lo ideal es que sean de ternara y suelen estar acompañados de chorizo (cortados en forma de ruedas o rodajas) y morcilla.
  • Las vísceras se deben lavar durante casi veinticuatro horas, aunque hoy las puede comprar ya limpias en cualquier casquería.
  •  Los ingredientes se cocinan muy lentamente en un caldo de carne con pimentón (algo que les proporcionan ese color rojo característico), salsa de tomate, especias (Clavo de olor, hoja de laurel, nuez moscada, tomillo, romero) y ajo, de tal forma que mediante la cocción (que sin ser viva, sea animada2) la gelatina de los elementos cárnicos que se desprenda y se homogenice entre los diversos ingredientes
  • Su elevado tiempo de cocción les hace ser un plato muy elaborado y complicado, apto solo para restaurantes o grandes familias que consumen una gran porción de los mismos en breve tiempo. Esta característica le convierte en un plato ideal para los meses de invierno. Es un plato que está más sabroso al hacerse de un día para otro, pero en ningún caso deben de durar más de una semana. Esta es una de las razones por las que ya no son elaborados artesanalmente en las casas, por el contrario se puede adquirir en supermercados ya precocinados.
  • Suele tener un ligero sabor picante debido al empleo de guindillas durante su elaboración. Se trata de un plato de gusto adquirido con gran aporte calórico y de grasas que suele asustar a los extranjeros.

BESUGO A LA MADRILEÑA

El besugo a la madrileña, más conocido como besugo al horno es un plato de pescado típico de la cocina madrileña. Los ingredientes de este plato son: el besugo elaborado al horno como ingrediente principal y que va acompañado de verduras, langostinos así como de un caldo de pescado. Se sirve caliente y es muy popular en algunos restaurantes madrileños.

Historia

Es un plato típico de Madrid, a pesar de que la capital de España se encuentra lejos de las costas. El plato se instaura en la gastronomía madrileña ya a finales del siglo XVIII, a partir de que en el año 1739 Manuel de Herrera pida a la Corte un camino expedito así como permisos especiales para poder transportar pescado fresco desde el puerto  vasco de Bermeo y los  puertos cántabros de Castro Urdiales, Santoña y Santander hasta la capital. Hoy en día, con Mercamadrid, el abastecimiento de besugo está asegurado.

Características

  • Este es fundamentalmente un plato de pescado al horno
  • Antiguamente se empleaban los hornos de las tahonas. En el que se elabora un fumet o caldo de pescado con las propias espinas del pescado. Algunos autores abogan por salsas poco elaboradas a base de miga de pan o pan rallado
  •  El plato es de elaboración rápida ya que el pescado no permanece en el horno más de diez minutos. Esto lo hace ideal para ser servido en los mesones de Madrid.
  • El besugo al horno con su aceite frito y su fino pan rallado que apenas le cubre, las medias rodajas de limón así como sus cascos de cebolla son sus características más importantes como plato.

GALLINEJAS

Las gallinejas son tripas e intestinos del cordero u otros animales que se venden en establecimientos habilitados al efecto. Su consumo se localiza casi de modo exclusivo en Madrid.  Antiguamente, la venta  de este producto se realizaba en quioscos o comercios populares

Las gallinejas clásicas llevan los siguientes ingredientes: los zarajos y los entresijos, después las mollejas blancas y las gallinejas, chorrillos y los botones, a continuación las tiras y por último los canutos, los chicharrones y las patatas.

Cada cordero cuenta con una sola gallineja, que en su interior tiene forma de espiral, pero al limpiarla se estira adoptando la apariencia de una mano con el pulgar encogido. Después, cuando se fríe, se encoge y se retuerce, volviendo a su formato original..

Historia

En 1950 ya se elaboraba este plato  de las sobras  que salían del extinto Matadero de Legazpi En aquellos días el olor de la fritura debía de ser muy familiar e intenso y atraer a la mayoría de los comensales a comer en estos sitios. Era un alimento barato asequible a las clases trabajadoras.

Ya en la obra de Benito Pérez Galdós Fortunata y Jacinta se hace mención a la gallineja: Características

  • Debe de ser una materia prima de calidad extraordinaria, procedente del cordero lechal.
  • El género debe de ser limpiado exhaustivamente y al detalle.
  • Los  materiales deben de llevar un tratamiento de congelación y refrigeración  muy estricto.
  • La maestría en la sartén, que incluye el perfecto conocimiento de cada producto y las variantes de su estado para darles el punto exacto de fritura, así como el manejo de los fuegos y temperatura de la grasa con que se fríen según la cantidad o alimento a cocinar. Aquí entra en juego el arte del cocinero.

BARTOLILLOS MADRILEÑOS

Los bartolillos son unos dulces típicos de la repostería madrileña que se suelen elaborar en Semana Santa. Se trata de una especie de empanadillas de forma triangular y frita, que se elabora con una masa muy fina, y rellena de crema pastelera. Los bartolillos se categorizan dentro de la repostería, al igual que los churros, como frutas de sartén debido a que son dulces que se elaboran en fritura de aceite. Se suelen servir preferentemente calientes.

Historia

Sobre el origen de este dulce español se sostienen diversas teorías:

  • Por un lado se dice que los trajeron los romanos en su invasión de la Península.
  •  Otros autores comentan que la receta vino de la época del Al’Andalus.
  • La tercera teoría es que este postre nació de las elaboraciones que realizaban las monjas de los conventos.

Existen descripciones de este dulce ya en el Siglo XIX asociadas a la cocina madrileña. Aunque se considera un dulce típico de Madrid, también se pueden encontrar en otras localidades como Guadalajara.

Características

Los bartolillos son dulces rellenos de crema pastelera, y posteriormente fritos. Algunos de ellos antiguamente se rellenaban de carne picada (de forma muy similar a las agujas de carne).

  • La masa se elabora con harina y manteca de cerdo, es tradicional que la crema pastelera se aromatice con algún licor.
  •  Tras su composición se suelen freír en aceite hirviendo hasta que doren.
  • Se sirven con azúcar espolvoreado, aunque también puede ser con almíbares
  • Deben comerse al instante, recién hechos, pero nunca templados.

Si le gusta lo dulce no deje pasar la oportunidad de probar este maravilloso plato de respostería.

Si quiere disfrutar de estos platos de temporada u otros platos más elaborados puede visitar el restaurante Independencia. En todos los espacios de este restaurante con encanto de Madrid se puede disfrutar de experiencias gastronómicas únicas, como prolongación de lo que nos ofrece la ciudad. Podrá degustar los platos de mayor elaboración, disponibles en la carta de temporada y  siempre respetando tradicionales recetas, con materias primas de primera calidad, así como tapas típicas de la zona. Si está en Madrid y no sabe dónde comer puede echarle un ojo a la carta del restaurante independencia.

En este artículo nos hemos centrados en los platos típicos y tradicionales de Madrid. Los que siempre se han consumido en la capital.

¿Qué le ha parecido este artículo? Esperamos que le haya gustado y sobre todo que le haya servido para tener más claro cuáles son los platos típicos de Madrid. Sin duda, hay mucha más variedad, y hoy en día se hacen platos muy elaborados. Si le ha gustado el artículo compártalo en redes sociales, y demos a conocer estos platos.

Categorías: Blog

Deja un comentario

Su dirección de e-mail no será publicada. Los campos obligatorios se indican con*

*